La noticia de la demolición de las viviendas de Salsidu, que se recogerá en el nuevo Plan General de ordenación Urbana (PGOU), ha pillado por sorpresa a muchos residentes en dichos inmuebles. Algunos se muestran incluso muy indignados y preocupados, lo que les llevó a mantener una reunión el pasado día 10 de marzo en la que analizaron la situación.
En algunos de esos bloques están actualmente arreglando la fachada y querían poner incluso ascensor. Así pues, se quejan de que en el Ayuntamiento les hayan dado permiso de obra aun sabiendo que las casas van a ser demolidas.
Lo más grave es que hay personas que han tenido que solicitar un préstamo para poder realizar dichas obras.
