La celebración hoy del campeonato de Ola Grande en La Galea ha congregado a numeroso público, pero también ha generado malestar entre los vecinos de la zona debido a la cantidad de vehículos estacionados de forma irregular en las estradas próximas al acantilado.
Según denuncian residentes del área, muchos asistentes ham optado por dejar sus coches en los bordes de la estrada Díliz, la carretera que conduce al antiguo cuartel, reduciendo el espacio para la circulación y creando situaciones consideradas peligrosas por quienes viven allí.
Pese a ello, aseguran que no se ha observado intervención alguna por parte de las autoridades.
Una vecina, visiblemente molesta, explicaba: “Luego aparcas en Azkorri para ir a la playa y te lleva el coche la grúa y encima te multan. ¿Dónde está hoy la autoridad?”. «¿Qué pasa?¿Esto no es acaso parte del pueblo?» concluía. La comparación con otras zonas del municipio donde el control suele ser estricto ha acentuado la sensación de agravio entre los residentes.
