Carta al director
Buenos días,
Soy vecina de Getxo y alumna de la Escuela Oficial de Idiomas de Getxo – Las Arenas.
Me dirijo a ustedes por si pudieran hacer eco de lo que está pasando a la hora de ser madre lactante y te prohíban ir a clases presenciales por ese motivo.
Empecé las clases con mi bebé de 4 meses. Compañeros y profesora me dieron todo su apoyo para atender a la bebé en clase y así no perder el ritmo de las mismas, siempre con un respeto mutuo y sin interferir en el ritmo de las clases.
En enero vino una sustituta y a partir de ahí comenzaron las intimidaciones por parte de la directora en el despacho, quien lejos de dar o estudiar una posible solución me dijo que no volviera a las clases.
Pedí que se me diera por escrito y me dijeron no se me daría nada oficial ya que no hay donde diga que no se puede acudir con bebés.
El pasado 12 de mayo me mandó un email el inspector de Educación de Gobierno Vasco diciéndome que había ordenado al centro que no dejara entrar a ninguna madre con bebés y donde me decían que no me iban a contar las faltas y me presentara por libre en el examen.
Además, el pasado 25 de mayo fue el examen oficial de euskera y tras preguntar si habia alguna zona habilitada para madres lactantes, como se hace para las oposiciones de Osakidetza, me dijeron que en ese centro no se hacen esas cosas.
He contactado con el Ararteko, quien está pidiendo explicaciones, ya que no debería existir razón alguna que justifique la negación a facilitar la lactancia materna al contravenir los derechos de las familias (en mi caso soy familia monoparental) y al perjudicar la salud de los bebés.
Pienso que la falta de información o de sensibilidad, los protocolos obsoletos, la resistencia al cambio, los prejuicios personales o la escasa formación del personal -incluida la directora del centro- pueden desembocar en una deficiente atención a los bebés de las familias lactantes, contraria a las recomendaciones de los organismos oficiales. Todo ellos impide además la conciliación y limita el acceso a la formación de las mujeres que quieren estudiar tras la maternidad.
Toda madre tiene el derecho a amamantar a sus hijos libremente en toda clase de lugares o recintos en que se encuentre o por el que transite legítimamente, conforme sea el interés superior del lactante y en este centro se nos está negando ese derecho.
N.F.
