Pulsa «Intro» para saltar al contenido

EH Bildu sustituye la política municipal por propaganda internacional en el pleno de Getxo a cuenta de una empresa de seguridad israelí contratada por el metro

EH Bildu volverá a utilizar el Ayuntamiento de Getxo como altavoz de su agenda internacional. Esta vez, llevará al próximo pleno una moción para exigir la ruptura del contrato entre Metro Bilbao y la empresa de seguridad I-SEC Aviation Security S.L., adjudicataria del servicio en el tramo Lutxana-Plencia. La empresa, de origen israelí, ha sido el blanco de la formación independentista, que la vincula con el “genocidio” contra el pueblo palestino.

La moción, que EH Bildu pretende replicar en todos los ayuntamientos -también en Getxo-, no cuestiona ni una sola cláusula del procedimiento de contratación ni denuncia ninguna ilegalidad. Tampoco plantea ninguna alternativa ni entra en la operativa del servicio. Simplemente exige la cancelación del contrato por la nacionalidad y el historial de la empresa matriz, fundada hace más de 40 años por exagentes del Shin Bet y de la aerolínea El Al, según Eh Bildu.

Mientras los vecinos de Getxo lidian con problemas cotidianos —inseguridad real en algunos barrios, limpieza deficiente, precios inasumibles de la vivienda o falta de apoyo al comercio local— EH Bildu sitúa como prioridad del debate municipal un conflicto bélico a miles de kilómetros. La moción pide que las instituciones vascas rompan cualquier vínculo comercial con entidades ligadas al Estado de Israel, ignorando por completo las competencias municipales y utilizando el pleno para trasladar su discurso geopolítico.

La actitud de EH Bildu no es nueva. Convierte el salón de plenos en una extensión de su estrategia ideológica, alejándose de las necesidades reales del municipio. En lugar de centrarse en soluciones para Getxo, impone una agenda ajena a la realidad inmediata de sus ciudadanos.

Metro Bilbao, empresa pública dependiente del Consorcio de Transportes de Vizcaya, adjudicó legalmente el contrato tras un proceso público y reglado. Pero para EH Bildu, la legalidad y la gestión quedan en segundo plano frente a su necesidad de agitación política.

Getxo vuelve a quedar atrapado en un debate que no le corresponde, mientras los problemas locales siguen acumulando polvo.