Los tres arrestados fueron contratados por una persona, residente en Valladolid, para coaccionar a un vecino de Algorta con el que se encontraba en litigios judiciales.

Detenidos
Foto de archivo. Coche patrulla de la Ertzaintza en Algorta

 

Agentes de la Comisaría de la Ertzaintza de Getxo detuvieron el lunes a tres personas por un delito de coacciones y amenazas. Los arrestados habían sido contratados por una persona, residente en Valladolid y que ha sido imputada, para coaccionar a un vecino de Algorta con el que se encontraba en litigios judiciales.

A las nueve y veinte de la mañana del pasado lunes, un ertzaina fuera de servicio informó de la presencia de tres personas en actitud sospechosa en Algorta. Varias agentes que realizaban tareas de prevención de delitos en Getxo se dirigieron rápidamente al lugar y procedieron a la identificación de los tres varones que se encontraban en el interior de un Seat Ibiza.

Los desconocidos no supieron dar una explicación convincente de su presencia en el lugar, y aseguraron que el coche se lo había dejado un amigo. Según se pudo comprobar el vehículo había sido alquilado en Valladolid y debía haber sido devuelto el día anterior, 18 de enero. Ante estas evidencias se procedió a su arresto por el robo del vehículo.

En el interior de automóvil se ocupó un destornillador, una navaja y un papel, oculto bajo la alfombrilla del copiloto, con los nombres y dirección de una pareja que vive en las inmediaciones de donde habían sido localizados los detenidos. Los ertzainas de la unidad de investigación de Getxo contactaron con este matrimonio y les informaron de lo sucedido. Según informó posteriormente en dependencias policiales una de estas personas, se encontraba en un procedimiento judicial contra un varón residente en Valladolid que le había amenazado en diferente ocasiones en los últimos años, y pensaba que pudiera estar detrás de lo sucedido.

Los investigadores pudieron constatar que el autor de las amenazas y quien había alquilado el Seat Ibiza, en el que viajaban los tres detenidos, era la misma persona. Se contactó con el sospechoso, quien dijo que no había entregado el coche por encontrarse enfermo y aseguró que no se lo había dejado a nadie. No obstante, ante las evidencias existentes se procedió a su imputación por un delito de amenazas y coacciones.

Los detenidos, de 21, 24 y 27 años, fueron puestos ayer por la tarde a disposición judicial.