Las familias del colegio Zubileta han denunciado públicamente la situación que viven desde hace más de un año a raíz de las obras del frontón cubierto del centro, anunciadas en septiembre de 2024. Según explican, desde el inicio de los trabajos el patio trasero quedó inutilizado y se prometió la instalación de una carpa provisional para los días de lluvia, una estructura que —aseguran— llegó tarde y fue retirada antes de finalizar el curso, dejando de nuevo al alumnado sin ningún espacio cubierto.
A lo largo de los últimos meses, señalan que se les han ido trasladando distintas fechas de finalización que nunca se han cumplido. Primero se anunció que la obra terminaría en enero de 2025; posteriormente se informó de que solo faltaban el suelo y la pintura; más tarde se indicó que quedaba pendiente la limpieza. Finalmente, en septiembre de 2025, se comunicó que el frontón estaba “acabado”, aunque no podía utilizarse por falta de permisos y porque no se había previsto el tratamiento acústico en un proyecto iniciado en 2019.
Un año después, las familias denuncian que la situación no ha cambiado: “En Zubileta seguimos sin frontón y sin carpa”, lamentan. Cuando llueve, explican, los niños y niñas no tienen un espacio donde jugar, realizar Educación Física o resguardarse, algo que consideran “básico en cualquier centro escolar”.
Aseguran haber sido pacientes, pero califican la situación de “insostenible”. Reclaman explicaciones claras y, sobre todo, una solución inmediata a un problema que, insisten, “perjudica únicamente a quienes menos culpa tienen: los menores”.
