Algorta no pudo disfrutar de una Sanjuanada en condiciones el pasado 23 de junio. Pese a los actos programados y anunciados por parte del Ayuntamiento en la plaza Estación de Algorta, la policía local precintó el escenario que se había montado.
Por lo visto, la instalación no fue supervisada por el arquitecto y los agentes decidieron acordonarla llegando a cancelarse muchos de los actos previstos.
Sin embargo, y pese a acordonarse la instalación -que no pasó la supervisión exigida-, durante toda la tarde menores de edad, permanecieron subidos en el escenario, jugando, sin que nadie hiciese nada por evitarlo. Una imprudencia que, afortunadamente, no ocasionó incidentes.
Los asistentes sí pudieron disfrutar de la hoguera pero no así, del resto de actividades que habían sido programadas.
Me parece correcto que si no ha pasado una supervision no se pueda realizar ni fun evento en el escenario. Respecto a lo segundo, serán los padres los que tienen que estar supervisando que sus hijos no se suban al escenario o no se suban a los cristales de la boca del metro en Telletxe.