Los populares denuncian que ante la carencia de servicio de ambulancia en Plencia, los dos vehículos de estas características con las que cuenta Getxo se ven obligados a cubrir servicios que llegan hasta Górliz, lo que supone un desplazamiento demasiado largo, que supera con creces los 8/12 minutos de respuesta que obliga el protocolo SOS DEIAK.
Muy preocupado x la falta de ambulancias en la comarca,ahora las de Getxo viajan hasta Plentzia,mal servicio para todos hasta que pase algo pic.twitter.com/oJf8DL48Ci
— Eduardo Andrade (@eandradepp) 14 de septiembre de 2017
Según ha explicado la presidenta del PP vizcaíno, durante la reunión el sindicato ha mostrado su gran preocupación por el deterioro que ha sufrido el servicio que se está ofreciendo con las ambulancias en Vizcaya, sobre todo en la margen derecha donde hay una gran saturación de trabajo y el número de ambulancias cada vez es menor.
El sindicato ha explicado además a los populares que la situación se volvió insostenible al abrir el hospital de Urduliz y destinar a este municipio la ambulancia que hasta entonces daba servicio a la zona de Plencia.
“Al abrir el hospital se creó una nueva necesidad: traslados urgentes, hospitalarios,… y se intentó cubrir dicha necesidad con recursos ya existentes. Sin embargo, dicha ambulancia está el 90% del tiempo sin activar, y Plencia se ha quedado sin servicio… no sólo han creado una necesidad más sino que además han dejado ahora otra sin cubrir”, ha explicado González.
La margen derecha está saturada, de hecho, una misma mañana los servicios de Zorroza, Santurce y Barakaldo han acabado trabajando en esta comarca porque no daban abasto.
Ante la carencia de servicio de ambulancia en Plencia, es Getxo quien se ve obligado a responder a las llamadas del 112. Es decir, las dos ambulancias con las que cuenta este municipio se ven obligadas a cubrir servicios que llegan hasta Gorliz, lo que supone un desplazamiento demasiado largo.
“Esta misma mañana se ha producido un atropello en Urduliz y hemos tenido que atender la llamada desde el servicio de Getxo mientras la ambulancia de Urduliz estaba parada, inactiva. La margen derecha está saturada, de hecho, una misma mañana los servicios de Zorroza, Santurce y Barakaldo han acabado trabajando en la margen derecha porque no daban abasto.”, ha lamentado el trabajador de SOS DEIAK.
“Cuando hablamos de emergencias el tiempo y la atención inmediata a los posibles enfermos o heridos es clave. Sin embargo, estas ambulancias se ven obligadas a recorrer distancias que superan el tiempo mínimo recomendado. Los 20 minutos que tarda una ambulancia en llegar de Getxo a Gorliz supera con creces los 8/12 minutos de respuesta que obliga el protocolo SOS DEIAK”, ha declarado González.
Pero los sindicatos han añadido además la pérdida de tiempo que supone en muchos casos el traslado de un paciente al hospital de Urduliz. Según han explicado a los populares, este centro médico está abierto tan sólo al 10% y atiende únicamente casos de urgencia porque no cuenta con especialistas ni con quirófanos donde operar. Así, en caso de que haya que intervenir al paciente, hacerle una placa, o ser atendido por alguna especialidad dicho paciente es derivado al hospital de Cruces, lo que supone otro traslado y más tiempo perdido.
“Prometieron abrir al completo el hospital en verano, más tarde retrasaron su apertura al 100% a noviembre y ahora ya hablan de año y medio. Este centro médico está ofreciendo un servicio a medias que en muchos casos lo único que hace es marear a las ambulancias y perder el tiempo de los pacientes que en muchos casos es esencial”, critican desde el sindicato.
En los últimos años la población de Vizcaya se ha triplicado y sin embargo la red de ambulancias sigue como se estableció en los años 80. El volumen de trabajo ha aumentado considerablemente y para poder mantener el tiempo de respuesta de seguridad establecido en el protocolo, el sindicato exige aumentar el número de ambulancias de modo que no se sature el servicio.
Tras esta reunión, el Partido Popular ha comprobado además que el problema no sólo afecta a la margen derecha, sino que la margen izquierda resulta otro “punto negro” en cuanto número de servicios.
“Cuando un ciudadano llama al 112 suele tratarse de una emergencia y lo que espera es que la ambulancia acuda en el menor tiempo posible. Lamentablemente, hemos escuchado en alguna ocasión la temida frase la ambulancia llegó demasiado tarde. Eso no lo podemos permitir. Un nuevo servicio completo (ambulancia, conductor, técnicos sanitarios…), cuesta unos 350.000 euros al año. Esto no supone un gran agujero para las arcas vascas y menos aún cuando se trata de la salud de nuestros ciudadanos”, ha puntualizado González.
Por todo, el PP ha decidido recoger la queja que presenta el sindicato y la trasladará al parlamento vasco para buscar una solución a la saturación de servicio que sufre este sector, comenzando por la solicitud de la ambulancia de Plencia
