Una cosa es posicionarse a favor de una causa perfectamente defendible, como puede ser la oposición a construir un aparcamiento subterráneo en Ibarbengoa -junto a la estación de metro fantasma en Getxo- y otra, muy distinta, es inventarse un suceso para encubrir a unos delincuentes que han atacado unas obras que han supuesto cuantiosos daños económicos.
Nos referimos a la plataforma vecinal Getxoko Auzokideok que ha publicado en su blog que el responsable del derribo de buena parte del vallado de la obras ha sido el fenómeno “Félix” con sus vientos de 100 kilómetros a la hora. A la mentira prefabricada de la plataforma no le ha faltado originalidad. «Felix ha azotado con más intensidad de la prevista precisamente en el barrio de Andra Mari. Hasta tal punto que ha derribado buena parte del vallado de la obra que pretende levantar el cuestionado parking subterráneo de Ibarbengoa. Vigilantes privados que piden no citar su identidad se han mostrado asombrados: “la verdad es que la gente no quiere este parking. Ahora parece que tampoco los elementos climatológicos. No sé qué va a pasar” ha publicado la plataforma.
El Gobierno Vasco y Euskal Trenbide Sarea (ETS) han desmontando la mentira de esta plataforma con un comunicado en el que han afirmado que los desperfectos son fruto de un ataque en el que «desconocidos han abordado la zona de obra con sierras y han destrozado los perfiles metálicos del cerramiento perimetral de la obra».
«Concretamente, han serrado 30 postes, derribando las chapas metálicas que delimitaban la parcela de obra. Además, han quitado los tornillos que sujetaban las piezas de acero galvanizado». Así pues no ha sido el viento quien ha provocado estos daños que, en una primera valoración, ascienden a más de 40.000 euros.
«Se trata por lo tanto de importantes desperfectos, realizados de forma planificada y los hechos han sido denunciados ante la Ertzaintza», ha añadido.