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Los vecinos del último reducto rural de Getxo, Andra Mari: «No estamos en contra del desarrollo urbanístico de la zona pero pedimos que no se derriben nuestras viviendas y se respeten nuestros derechos»

Los vecinos del último espacio rural de Getxo, el barrio de Andra Mari, quieren que en el proceso de renovación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) que marcará el futuro desarrollo urbanístico del municipio, se les respete. «Queremos que nos respeten y seguir viviendo donde vivimos». En una entrevista concedida a este Diario digital dejan claro que no están en contra del desarrollo urbanístico de Getxo «puesto que queremos que los jóvenes puedan quedarse y que se abarate la vivienda». «Lo que pedimos es compatible con todo lo demás» con estas palabras se expresaba uno de los miembros de la Asociación Andra Mari Lurra.

Somos vecinos de tercera porque nos hemos quedado sin servicios, con un autobús cada hora, etc. Estamos como Las Maldivas, aislados, por lo que solo pedimos que se sepa que en esta zona de Getxo estamos unos vecinos viviendo.

Miembro de la Asociación Andra Mari Gure Lurra

Piden que en el nuevo PGOU se contemplen sus derechos puesto que a día de hoy se consideran tratados como vecinos de tercera al haberse quedado sin servicios, con un autobús cada hora, etc. «Estamos como Las Maldivas, aislados, por lo que solo pedimos que se sepa que en esta zona de Getxo estamos unos vecinos viviendo. El Equipo redactor del PGOU no puede verlo como un sitio en el que no vive nadie» añadía.

Desde la Asociación Andra Mari Gure Lurra quieren que se cumpla con la Declaraci´ón que se aprobó en el Pleno municipal de Getxo en el año 2010 en el que se contemplaban distintos puntos como el «mantenimiento de las viviendas existentes» y «el no derribo de las mismas», así como que se tenga en consideración la existencia de edificaciones agrupadas en el suelo urbanizable de Andra Mari, contemplándose la posibilidad de su calificación como nuevos núcleos urbanos, y la inclusión en los núcleos ya existentes de aquellas viviendas cuya ubicación se halle muy próxima a los límites de los mismos».

Por otro lado, recuerdan que en el caso de que hubiera que realizarse algún derribo de vivienda este debiera ser excepcional garantizándose además el derecho al realojo de los ocupantes legales, en los términos establecidos en el marco legal vigente en esta materia.