«En un rincón incomparable del Puerto Viejo, se alquila el bar Portu Zaharra». Así comienza el anuncio que puede verse en un conocido portal inmobiliario de Internet donde se indica que, con 90 m² útiles, se alquila este establecimiento por una cuota de 4.500 euros al mes.
El negocio lleva cerrado desde la pandemia y se trata de uno de los históricos negocios hosteleros del Puerto Viejo cuyos clientes aprovechaban las escalinatas del Puerto para tomar su consumición al mismo tiempo que contemplaban el paisaje o la puesta de sol si las nubes lo permitían.
Es un local ubicado en un rincón privilegiado que no ha vuelto a abrir la persiana en muchos meses y se mantiene a la espera de que aparezca algún emprendedor dispuesto a aceptar el pago de dicha renta mensual para explotar el negocio y aprovechar el tirón de las fiestas del Puerto Viejo que se celebrarán en menos de un mes.
