El Ayuntamiento de Getxo ha anunciado una reorganización del equipo de gobierno municipal que entrará en vigor el próximo 22 de octubre, coincidiendo con la reincorporación del concejal Ignacio Uriarte (EAJ-PNV), apartado de la primera línea política desde hace meses por motivos de salud y tras verse implicado en varios episodios controvertidos de la legislatura.
La alcaldesa Amaia Aguirre presentaba esta mañana los cambios, que enmarcaba en el “balance de mitad de mandato” y con el objetivo de “reforzar la estructura de gobierno para afrontar con solvencia la segunda mitad de la legislatura”. Sin embargo, la vuelta de Uriarte marca el punto más significativo del reajuste, tanto por el papel que volverá a ocupar como por las circunstancias que rodearon su salida.
El edil recupera la responsabilidad del área de Hacienda, así como la presidencia de la Comisión de Organización y Cuentas y la dirección de Vía Pública, además de coordinar el proyecto de recuperación de las Galerías de Punta Begoña. No obstante, pierde la portavocía del grupo municipal del PNV, que pasa a manos de Janire Ocio, un movimiento interpretado en clave interna como un reequilibrio de poder dentro del grupo nacionalista.
Durante su baja, Uriarte se mantuvo oficialmente fuera de la gestión diaria del Ayuntamiento, aunque continuó asistiendo a los plenos para ejercer su derecho a voto. Su ausencia generó un vacío en áreas clave de la administración local, especialmente en la gestión presupuestaria, donde era considerado un concejal con amplio conocimiento técnico.
Fuentes del PNV consultadas por Diario de Getxo reconocen que la reincorporación de Uriarte “puede aportar estabilidad técnica” en un momento de desgaste del equipo de gobierno, aunque también admiten que “la pérdida de la portavocía refleja un cambio de confianza dentro del grupo”.
El regreso del edil se produce en un contexto de tensión interna en el PNV de Getxo, donde, según publicó recientemente este medio, crecen las voces que reclaman un relevo de liderazgo de cara a 2027. Militantes y simpatizantes de la formación local cuestionan la continuidad de Amaia Aguirre al frente del Ayuntamiento tras dos legislaturas “difíciles”, y abogan por una renovación de perfiles en la próxima candidatura.
En los últimos meses, además, Diario de Getxo reveló que Uriarte figuró entre los admitidos en un proceso selectivo del Ayuntamiento de Zalla para cubrir plazas de administrativo, lo que fue interpretado como una posible búsqueda de salida laboral fuera de la política. Finalmente, no superó la primera fase del proceso.
Con su vuelta al gobierno municipal, Ignacio Uriarte recupera parte de su peso institucional en el Ejecutivo local, aunque en un contexto mucho más incierto y con una responsabilidad política reforzada pero menos visible. La alcaldesa, por su parte, ha asegurado que la nueva distribución de áreas responde al objetivo de “reforzar la gestión y garantizar el cumplimiento de los compromisos del Plan de Legislatura”.




