La portavoz de la Fundación Mikel Uriarte y madre del joven de 22 años fallecido en el Puente Colgante, Chely González, ha calificado de “burla” las actuaciones que se llevarán a cabo en la barquilla del transbordador al tratarse de cuestiones relacionadas más bien con la estética y la «modernidad» en vez de con aspectos de seguridad. “Si es verdad que solo van a pintar la barquilla y se van a centrar en la cuestión estética me parece una burla hacia los dos fallecidos y hacia todos los usuarios” ha explicado en una entrevista a Uribe FM.

Aun así, González considera que el hecho de que vayan a realizar una serie de modificaciones en la barquilla –aunque sean puramente estéticas- supone un reconocimiento por parte de los responsables del Puente «de que la instalación no está a la altura del puente y que es tercermundista».

Ha recordado que el suelo de la zona peatonal se debería haber cambiado cuando se modificó el suelo de la zona de vehículos porque está obsoleto ya que «es una madera baquelizada totalmente desgastada».

González ha denunciado además que no se cumplen las medidas de seguridad que exige Europa y ha lamentado que nadie obligue a los responsables de este medio de transporte a cumplirlas. «Las barreras existentes actualmente son muy bajas porque deben tener como mínimo 90 centímetros de altura y entre barrote y barrote tiene que haber una distancia de 15 centímetros -hoy son 25-.  Ademas, tendría que haber un rodapiés para evitar el deslizamiento, algo que no existe en la actualidad» ha explicado.

Asimismo, González ha criticado que no se haya realizado ni un solo simulacro en la instalación desde el año 2005 -año en que murió un ciudadano-. Cinco años después, en 2010, perdía la vida el joven Mikel Uriarte tras caer con su vehículo al agua desde la barquilla.

Actuaciones

Los primeros trabajos se ejecutarán a partir de esta semana con el pintado de la barquilla, aunque no será hasta entrado el mes de mayo cuando, previsiblemente, el transbordador estrene su nueva imagen al completo. Según marca el proyecto, los laterales del interior de la estructura estarán pintados en tonos azul turquesa. La lluvia condicionaría sobremanera el desarrollo de estos trabajos que se llevarán a cabo de noche y en los que se aplicará pintura antideslizante y lavable y que se espera que estén completamente finalizados con la llegada de la Semana Santa.

También se quitarán rascaduras y desconchados de los laterales interiores tanto de la zona para pasajeros como de la destinada para vehículos y bicicletas.

Además, se mejorará la señalética. En los laterales internos de la barquilla se dispondrán unos paneles de color azul turquesa en los que se podrá insertar publicidad abriendo así  la puerta a que las compañías que así lo deseen puedan anunciarse en el puente desde el momento en el que se concluyan los trabajos.