La Asociación de vecinos de Aldapa, Aldapan Bizi, ha lamentado dos ausencias esta primavera en el barrio getxotarra. “La primera ausencia es la de las golondrinas. Un año más no han anidado en Aldapas. Las golondrinas vienen del norte de Africa y este año en Getxo solo se las ha podido divisar en Aixerrota” ha explicado. La segunda gran ausencia es la de las abejas, un problema de índole mayor para la plataforma vecinal. “Aunque sí se ven abejorros en la estrada de Ibetas, la presencia de abejas en todo el municipio de Getxo, y en Andra Mari en especial supone un peligro de enorme importancia: la polinización de frutales depende de las abejas. Las plagas de avispas -asiáticas, africanas- es la razón de la merma de nuestras abejas» ha añadido el colectivo.

«Las instituciones ya se están lavando las manos, o más bien lanzándose unas a otras este nido avispero. La diputación se desentiende” han denunciado desde la Asociación de vecinos. “Los bomberos atendían las llamadas y alertas de nidos de avispas y ahora está en manos de los ayuntamientos -en este caso en el de Getxo-. “Dada la sensibilidad de largo demostrada del consistorio getxotarra y sus responsables económicos y medioambientales, las dudas abren las puertas al pesimismo” se queja Aldapan Bizi.

Ante la falta de implicación de las instituciones, los vecinos de la plataforma Auzokideok decidieron iniciar un cursillo para la implantación de trampas que acaben con las avispas y no con las abejas. El experimento casero ha sido puesto en la estrada de Tosu. Se trata de una simple combinación de zumo de arándano, cerveza negra y vino en una botella de plástico con una obertura de 9 milímetros de diámetro. «Puede que las abejas no repueblen nuestros jardines en Aldapas, ni los huertos cercanos, pero es indispensable organizar un modo de eliminar a la especie de la avispa invasora» han advertido.

Presencia de ratas

El barrio de Aldapa, al igual que toda la cuenca del río Gobela padece otro problema: la creciente presencia de ratas. “La creciente comuna de gatos que crecen en las huertas entre Errotaxu y Aldapas han ayudado a cultivadores y vecinos a solventar al menos meridianamente un problema de magnitud alarmante en nuestro barrio: la creciente presencia de ratas” han denunciado desde la Asociación de vecinos. “Es cierto que la presencia de ratas es histórica, pero la colmatación urbana del río, y las obras en Ollarretxe han hecho que las ratas ubiquen sus madrigueras en los barrios aledaños a Ollarretxe. Estos roedores tienen una autopista para trasladarse de barrio a barrio en toda la cuenca: la red de saneamiento y acequias municipales» han argumentado.

Aunque el ayuntamiento atiende las llamadas de la presencia de ratas, esta no actúa en zonas particulares, según han informado los vecinos. Sin embargo, a estas zonas particulares las ratas y ratones llegan a través de la red pública de tuberías siendo el resultado de un goteo urbanístico de ocupación de espacios antes “salvajes”. Asimismo, han denunciado que el ayuntamiento pretende ejecutar más en la zona próxima a Aldapas, en concreto en el conjunto de Venancios que incluyen los números 12, 14 y 16 de la calle Ollaretxe.

Aldapan Bizi es, según se autodefine en su página web, una asociación de vecinos del barrio de Aldapa, nacida «tras las agresiones exteriores» sufridas años atrás: por un lado el rechazado tanatorio ubicado en la antigua panadería Azaldegi, y por otro la destrucción de la plaza. «Nuestro barrio ha pasado de un lugar idóneo para vivir a convertirse en un ejemplo más de la especulación -mortuoria- y los pingües beneficios del hormigón y las adjudicaciones a expuertas. Todo ello sin permitir que las vecinas y vecinos decidan cómo desean que sea el barrio en el que viven y al que pertenecen. Por ello, una asociación que viene a sumar fuerzas a las vecinas y vecinos que ya vienen trabajando en el barrio frente a las agresiones sufridas» explican en su blog.