Vecinos de la zona de la avenida Salsidu han mostrado su preocupación por la reciente actividad detectada en una vivienda que lleva años cerrada y tapiada. Según relatan, a finales de julio y principios de agosto se habría producido un cambio de situación: parte de la maleza de la entrada ha sido retirada y algunas ventanas presentan signos de haber sido forzadas.
La sorpresa ha llegado cuando residentes han afirmado haber visto a un grupo de personas magrebíes utilizando la fuente del cercano parque de Zubilleta para llenar garrafas de agua y asearse. Todo apunta a que la casa abandonada de Salsidu 83 cuenta ahora con «nuevos inquilinos».




