El poder real del Ayuntamiento de Getxo está en manos del actual Secretario General, Ignacio Javier Etxebarria Etxeita. Es el alcalde efectivo en la sombra y quien toma las decisiones en lugar de Imanol Landa, más conocido como «El Indeciso».

 

Etxeita

Nunca fue elegido en las urnas pero el poder real del Ayuntamiento de Getxo está en sus manos. Los ciudadanos del municipio no le ponen cara y su nombre es bastante conocido entre destacados miembros PNV de Vizcaya. Es abogado de profesión y como tal ha llegado a representar jurídicamente a varios Ayuntamientos del Territorio –la mayoría gobernados por el PNV- hasta que en noviembre de 2002 tomó posesión de su cargo como Secretario General del Ayuntamiento de Getxo.

Desde entonces Etxeita ha ejercido su cargo de Secretario aprovechando su influencia en ciertos círculos y la indecisión del alcalde Imanol Landa.

Este oscuro personaje ha llegado a tomar las riendas de un consistorio adoptando decisiones que han costado mucho dinero y recursos a los vecinos. Y lo que es peor, todo ello con el beneplácito del alcalde electo Imanol Landa I “El Indeciso”.

El nombre de Javier Etxebarria Etxeita comienza a sonar entre los getxotarras al haberse conocido en los últimos meses que Etxeita «vulneró el régimen de incompatibilidades de cargos públicos, recibió sobresueldos a pesar de su abultada remuneración y posibilitó la contratación a dedo de la Responsable de Personal». Todas estas acusaciones las realizó la sección sindical de sindicato USO en el Ayuntamiento de Getxo.  Pero además, el nombre de Etxebarria Etxeita apareció en repetidas ocasiones en el proceso de adjudicación ilegal de la perrera municipal y en la irregular prórroga del servicio de limpieza cometido en 2011.

Asesoramiento de Etxeita

En la última década, el alcalde electo del Ayuntamiento de Getxo, Imanol Landa, se ha limitado a obedecer las directrices del Secretario General en cada uno de los procedimientos judiciales en los que se ha visto inmerso el Ayuntamiento.

Consciente de su enorme peso e influencia a la hora de tomar decisiones de Gobierno, Etxeita llegó a recomendar en innumerables ocasiones «no cumplir» con las resoluciones judiciales y emplear el dinero público para recurrir, pleitear, demorar y aguantar todo lo necesario.

Además, su ansia viva de controlarlo todo le llevó a facilitar la contratación a dedo de la Responsable de Personal del Ayuntamiento de Getxo con el fin de colocar en puestos clave del Ayuntamiento a personas que le ayudasen a ejercer el control total del municipio.

De este modo, la Jefa de Personal de Getxo le debe el cargo al letrado y se lo ha agradecido este pasado mes de febrero negando en un escrito todas las acusaciones que el sindicato USO vierte contra Etxeita.