Durante los casi 40 años que el PNV lleva al mando del Ayuntamiento ha tejido una red perfectamente organizada con el fin de tratar de ocultar o desmentir cualquier información que pudiera perjudicar su imagen.
Se aproxima septiembre y con él la llegada del último curso de la legislatura en Getxo. El PNV tiene preparada su maquinaria propagandística para tratar de seguir al mando del Ayuntamiento tal y como lleva haciéndolo casi 40 años. Un gran aparato de comunicación municipal a su disposición en el que se incluye el semanario municipal Getxoberri junto con un amplio número de personas preparadas para tratar de vender a la ciudadanía una falsa apariencia. Entre esas personas se encuentran «periodistas» -entrecomillado porque un periodista debe siempre enfrentarse al poder fiscalizando, controlando y denunciando-, «técnicos» -también entrecomillado porque un verdadero técnico municipal nunca debe adaptar sus informes a lo que el gobernantes de turno quiera escuchar para complacerle, un hecho habitual en Getxo-, así como un excesivo número de asesores pagados con dinero de todos los getxotarras para buscar el bienestar y éxito del PNV en lugar del de todo el municipio y sus vecinos.
Parte de esa estrategia son por ejemplo las abundantes obras en el municipio que todavía permanecen paradas -desde hace tiempo- con el fin de hacer coincidir su conclusión e inauguración con el periodo electoral o la ocultación de abundantes sucesos que muestran el aumento de la inseguridad en el municipio.
Durante estos casi 40 años el PNV ha sabido tejer en Getxo una red perfectamente organizada con el fin de tratar de ocultar o desmentir cualquier información que pudiera perjudicar su imagen. Además de sus propios recursos municipales, el PNV de Getxo tiene a su favor el apoyo del Grupo de Comunicación «Grupo Noticias» que curiosamente recibió dinero del Gobierno de Íñigo Urkullu para la publicación de informaciones favorables a su gestión, a través de publicidad encubierta quebrando así la legalidad y, de paso, trasvasar dinero a los periódicos amigos. La jueza ve posibles delitos de malversación, prevaricación y fraude por las subvenciones “fraccionadas y ad hoc” a dicho Grupo de Comunicación.
Promesas incumplidas
En este nuevo año los getxotarras volverán a escuchar por boca del Alcalde falsas promesas tal y como ocurrió en 2011 cuando prometió 400 plazas de aparcamiento en el centro de Algorta que nunca llegaron, o la habilitación de un jardín inglés en la explanada del Puerto Viejo de Algorta. Diario de Getxo se hizo eco de un listado de promesas incumplidas del PNV en el municipio que difundió el número dos del PP Eduardo Andrade en su blog.
Los robos en viviendas y comercios del municipio, el aumento de impuestos en 2013 con el apoyo de Bildu, el incremento de desempleados -en julio se han registrado 4.705 getxotarras en paro-, el cierre de un importante número de comercios -más de 700 desde 2008- o el estado descuidado de calles en cuanto a limpieza y mantenimiento son algunas de las cuestiones que el Equipo de Gobierno ha tratado de ocultar dando una imagen de «pueblo tranquilo, saneado y bien gestionado» a pesar de que Getxo sigue manteniendo una deuda superior que al comienzo de la crisis.