Reclama una campaña ciudadana de concienciación y colaboración en la que se informe del gasto económico que supone retirar estas pintadas. Los socialistas piden habilitar puntos concretos donde los grafiteros «puedan realizar sus creaciones sin dañar los bienes de la comunidad o de sus habitantes».
El Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Getxo solicitará la puesta en marcha de un plan de choque para la eliminación de todas las pintadas existentes en muros, fachadas y demás elementos urbanos, tanto públicos como privados de la localidad.
Asimismo, reclamará a los responsables municipales la realización de una campaña ciudadana de concienciación y colaboración en la que se informe del gasto económico que supone retirar estas pintadas, para transmitir la necesidad de que el municipio se mantenga limpio y libre de pintadas.
Del mismo modo, PSE-EE va a instar al Ayuntamiento a que habilite espacios públicos, como muros o paneles móviles, para contribuir a que los grafiteros puedan expresar su arte sin dañar los bienes de la comunidad.
En estas propuestas, que vienen recogidas en una moción que será debatida en el próximo pleno municipal, el Portavoz Socialista, Luis Almansa, explica que «la lamentable situación que presentan numerosas zonas de nuestro municipio como consecuencia de pintadas genera una mala imagen que, sin duda, debería lucir limpio con el fin de conseguir un beneficio estético tanto para sus vecinos y vecinas como para sus visitantes».
Tras considerar que las pintadas no ofrecen una adecuada imagen del patrimonio histórico y mobiliario urbano, el representante socialista ha dicho que son «numerosas las quejas de vecinos, vecinas y comerciantes que ven como día a día las paredes están cubiertas de pintadas sin que sepan exactamente a qué atenerse para denunciar esta molestia y este ataque directo a sus bienes».
Diferenciar pintadas incívicas de grafitis
«Pero es necesario diferenciar las pintadas incívicas hechas en lugares prohibidos y de forma ilegal, del grafiti como expresión artística, arte que se inició en los años 60 en Nueva York y que se ha transformado en todo un género dentro del mismo», ha agregado Almansa.
Además, el Portavoz de PSE-EE ha recordado que municipios que han llevado a cabo medidas enfocadas a eliminar y a reducir el tiempo de exposición de las pintadas, han establecido un compromiso de borrado de aproximadamente 24 horas, consiguiendo reducir notablemente la presencia de pintadas en sus calles, además de desalentar su reaparición.
A su entender, una medida complementaria sería habilitar puntos concretos en los que los grafiteros «puedan dar rienda suelta a su imaginación y realizar sus creaciones sin dañar los bienes de la comunidad o de sus habitantes». «También desde el Ayuntamiento y desde los centros educativos se deberían fomentar los valores del espíritu cívico y el respeto al bien común con una campaña informativa y de concienciación», ha concluido.