La familia afectada por la actual planta compactadora entiende que el Ayuntamiento «nunca ha prestado un servicio de recogida efectivo a esta vivienda”.
Aprovechando que el Ayuntamiento de Getxo se encuentra en pleno proceso de concesión de la gestión de los residuos urbanos del municipio, la familia afectada por el antiguo basurero y catualmente por la planta compactadora recuerda a los representantes políticos algunas de sus históricas reclamaciones para que sean tenidas en cuenta.
Una de esas reclamaciones de la familia Maruri-Zarraga re refiere a la devolución de los pagos realizados por concepto de basuras al no haber recibido un servicio de recogida efectiva de los residuos urbanos. Critican que el contenedor más cercano se encuentra a 750 metros de la vivienda “por lo que entendemos que el Ayuntamiento nunca ha prestado un servicio de recogida efectivo a esta vivienda”
Incumplimiento de la normativa de ruidos
La familia afectada reclama -una vez más- que dicha planta compactadora cumpla estrictamente la normativa municipal de ruidos. Denuncian que desde el inicio de su actividad en 2006 vienen soportando ruidos que vulneran su derecho al descanso y acarrean un «evidente empeoramiento de la calidad de vida». Reclaman a su vez una restricción de actividad en relación al horario nocturno protegido, y la preparación de un nuevo acceso a los camiones desde la parte superior del vertedero (trasera de Artea), sobre un antiguo sendero existente.
Control de lixiviados
También reclaman un control exhaustivo de la gestión de lixiviados y aguas contaminadas procedentes del vertedero al haberse demostrado “que este tipo de aguas se han vertido de manera inadecuada apareciendo por arroyos y arquetas del entorno”. “Esto nos hace creer que el control que el ayuntamiento realiza de este tema es deficitario” puntualizan los afectados.
Para finalizar reclaman que se les informe detalladamente sobre la supuesta intención de implantar en la zona una nueva actividad en forma de Planta de Triaje, “con todo lo que ello conlleva”.